¿Quién no conoce el 'Top Manta' a día de hoy?

En la calle, en el mercadillo, en la playa o incluso en el metro: es difícil apartar la mirada de esas telas repletas de coloridos objetos con flamantes logos.

Bolsos Dolce&Gabbana, riñoneras de Gucci y gafas Tous a precios mucho más bajos que en cualquier otro lugar. Las mejores marcas al alcance de tu mano, y a precios de escándalo...

¿O quizás el precio real es mucho más caro de lo que te imaginas?

El peligro de las gafas de sol falsas

Ya sabes que no todo lo que reluce es oro, y aquí tenemos uno de los ejemplos más flagrantes. Hay tres requisitos mínimos que todas gafas homologadas deben tener:

1. Filtrar la Transmisión de la luz: entre 3 y 100%.

2. Filtrar UV: mínimo 99% (etiquetado UV400).

3. Mejorar la calidad y nitidez de imagen: Aberraciones cromáticas y monocromáticas generan ruido en la imagen. 

Como te puedes imaginar, al fabricante de gafas falsas estos tres detalles no le resultan de especial importancia, y en consecuencia podemos obtener lesiones graves en nuestros ojos.

Lesiones debidas a gafas no homologadas

Las lentes de sol no homologadas bloquean la transmisión de luz de forma irregular a lo largo del cristal y sin cuantificar, y además no ofrecen un filtro de luz UV seguro.

De hecho, genera una circunstancia especialmente peligrosa, dado que bloquean la transmisión de la luz por la oscuridad del cristal produciendo una dilatación de la pupila y permitiendo así altas dosis de radiación UV responsables de enfermedades y problemas de salud ocular como cataratas, maculopatía, pterigión, cáncer conjuntival e incluso melanoma.

Las gafas de sol, al fin y al cabo, sirven para proteger nuestra visión. Es importante que estén siempre homologadas para poder cumplir su función principal.

¿Qué te ha parecido este artículo? ¿Volverías a comprar gafas no homologadas?

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